La luz natural es un elemento esencial en los retratos que se ha visto eclipsada por accesorios como: flashes, paraguas, reflectores y demás. Pero, ¿cómo puedes aprovechar la luz natural en tus retratos? ¡Sigue leyendo!
Los accesorios mencionados anteriormente son de gran ayuda para lograr grandes retratos, pero no debemos olvidar que la luz natural, nos ofrece resultados mucho más naturales y estéticos. Conozcamos algunas características de la luz natural:
Luz natural. La Intensidad
No podemos regular la intensidad a nuestro antojo de la luz natural, por eso debemos buscar trucos para adaptarla a nuestro propósito.
Por ejemplo, en un día soleado, la luz directa del sol puede producir fuertes contrastes que desmejoran la fotografía como se puede ver en la imagen de la izquierda. ¿Qué podemos hacer?
- Busca una zona de sombra, ya puede ser bajo un árbol, porche, edificio, etc.
- Logra crear esa sombra, si NO encontramos algo que nos proporcione sombra podemos usar una tela, un difusor, etc. para evitar esos fuertes contrastes. Como se ve la imagen de derecha donde se ha usado un difusor.
- Aprovecha los días nublados. Las nubes son grandes difusores para la luz de nuestra escena. Aunque no te puedes fiar siempre ya que en función de la intensidad del sol y de la densidad de las nubes es posible que también debas buscar sombras o crearlas.
Luz natural. El color
Otra diferencia fundamental entre la iluminación natural y la artificial es el color de la misma.
La luz artificial de los flashes es de color blanca y es muy sencilla de interpretar por parte de nuestra cámara.
Sin embargo, cuando utilizamos luz natural a la cámara le cuesta más interpretar ya que:
- La luz puede ser más fría o más cálida dependiendo de varios factores.
- También puede tener tintes verdes, o magentas, o de otra dominante, por la presencia de un objeto que está rebotando la luz, etc.
Para ayudar a la cámara a interpretar la luz tenemos distintos modos de balance de blancos: soleado, nublado, sombra, tungsteno, fluorescente…
Pero a veces los modos de balance de blancos no son suficientes y hay que jugar con otros factores. Por ejemplo fíjate en las siguientes fotografías:
La imagen está tomada con una pared amarilla detrás. En la imagen de la izquierda, la escena queda impregnada de una excesiva y desagradable dominante amarilla.
¿Qué se ha hecho para remediarlo?
- Dispara en Raw, de ese modo, aunque no hayas hecho una buena elección en el momento de la toma, podrás corregirlo sin miedo a pérdida de calidad en el procesado.
- Usa accesorios que te permitan ajustar el balance de blancos.
- O incluso es posible que optes por no balancear adecuadamente la imagen y lograr resultados distintos.
- En cualquier caso, sea cual sea tu intención, deberás tener en cuenta que el color de la luz natural varía, no es un blanco perfecto
Luz natural. La Dirección
Con iluminación natural, no podemos mover al sol, somos nosotros como fotógrafos o el sujeto, los que debemos variar de posición, para buscar que la iluminación sea la adecuada.
Es fundamental conocer de dónde procede la luz y cómo está actuando sobre el sujeto para situar a éste en la posición apropiada. Algunos consejos que puedes poner en práctica:
- No sitúes al sujeto de modo que la luz incida directamente sobre su cara. Si lo haces el sujeto no podrá abrir los ojos, fruncirá el ceño, etc. Y generará sombras muy duras.
- Si además de la luz natural cuentas con un flash, o con un reflector, sitúa al sujeto de espaldas al sol y trata de iluminar su rostro con el reflector, o bien con el flash de relleno, para evitar que éste quede oscuro.
- Otro tipo de fotografía que suele quedar muy bien es situar al sujeto con el sol ligeramente en su espalda, pero que el sol nunca salga en la fotografía. Con ese efecto natural haremos que aparezcan destellos en su pelo y en la parte de la cara directamente iluminada que ofrecerán resultados muy satisfactorios.
Un ejercicio que puedes practicar: Si tienes a un sujeto voluntarioso, puedes, situarte enfrente de él y realizar un giro de 360º a su alrededor, pidiéndole que rote sobre sí mismo para no dejar de mirarte en ningún momento. De esa forma, podrás ver cómo actúa la luz en cada posición y escoger la toma que más satisfaga.
«La Luz Natural No Es Fácil, Pero Tienes Muchos Días Para Conocerla y Dominarla»
Como puedes ver, controlar la luz natural no es fácil, por eso te animo sigue practicando y aprendiendo para poder dominar la fotografía de retrato con iluminación natural. Así que ya sabes, manos a la obra.
Información: http://www.dzoom.org.es