Cuando haces fotografías, ¿qué parámetro sueles configurar primero? Seguramente dependerá de muchos factores, pero especialmente te centrarás en lo que quieres fotografiar. Una vez lo sepas, deberás determinar qué velocidad de obturación o diafragma concreto establecerás.
Como mencionábamos, lo primero que necesitas saber es, qué es la profundidad de campo y después decidir cuánta profundidad de campo quieres que tenga tú fotografía.
La explicación de la profundidad de campo es sencilla, es aquella zona de la imagen que está nítida o bien enfocada, en contraste con otras zonas de menor enfoque.
En esta imagen puedes ver que en el centro, hemos conseguido una gran profundidad de campo, de modo que la cámara enfoca una amplia distancia. En cambio, en la parte principal y final se ha reducido muchísimo la profundidad de campo, o sea, la foto saldrá desenfocado excepto lo que haya en el medio.
Para obtener más o menos profundidad de campo contamos con el diafragma. El diafragma es una parte del objetivo que podemos abrir o cerrar. Se mide en valores f y cuanto menor sea el número f significa que el diafragma está más abierto. Cada valor que se le dé a f corresponde a la apertura que el diafragma tiene en cada momento. Cuanto más abierto está, más luz entra y a la vez conseguimos menos profundidad de campo.
Cuando se trata del diafragma, y tenemos poca práctica, nos cuesta saber qué valor f debemos poner. Es por ello que en el artículo de hoy vamos a explicar qué valores de diafragma poner en función de la fotografía que quieras obtener.
Pero tranquilo llegará un día, cuando hayas cogido más soltura, que saber qué valor poner al diafragma no te resultará nada difícil. ¡Veamos algunos ejemplos!
Abrir el Diafragma
Cuando quieras hacer un retrato y quieres que el fondo quede desenfocado tienes que tener en cuenta diversos factores:
- Desenfocar el fondo. Significa que queremos poca profundidad de campo, por lo tanto, abriremos el diafragma todo lo que podamos.
- Medir la luz sin modificar el diafragma. Hacemos la foto y vemos el resultado. Si hemos conseguido desenfocar el fondo como queríamos, ya tenemos nuestro retrato.
De lo contrario, debes probar algunas cosas más. Por ejemplo:
- Si el fondo se ve demasiado habrá que buscar un fondo que quede mucho más alejado del sujeto o bien mover a nuestro modelo. Tenemos dos maneras de conseguir que el fondo se vea desenfocado. Podemos alejar al sujeto del fondo o bien nos acercamos al modelo lo máximo que podamos.
- Contar con un objetivo luminoso te ayudará a desenfocar los objetos. Los objetivos luminosos, no hace falta dispararlos a plena apertura. Ves probando a abrir poco a poco el objetivo hasta que consigas el desenfoque que andas buscando. Los objetivos que tienen diafragmas de f/1.4 son ideales.
Cerrar el Diafragma
Ahora vamos a tratar de aumentar la profundidad de campo. Es decir, que tanto nuestro modelo como el fondo se vea nítido. Para ello, será necesario cerrar el diafragma. Podemos cerrar hasta cierto límite, ya que los objetivos tienen una máxima y una mínima apertura.
Algunos objetivos te permiten cerrar el diafragma hasta f/32 o más, pero la gran mayoría permiten cerrar hasta f/16 o f/22. Pero no pienses que debemos cerrar el objetivo al máximo para enfocarlo todo tal como sucede al desenfocar, normalmente no se necesita cerrar más de f/11 salvo en dos situaciones concretas:
Primera situación: Cuando quiero alargar aún más la exposición y no tengo los filtros ND conmigo. En la siguiente fotografía de las chimeneas estoy utilizando un filtro ND que resta 10 pasos de luz, lo que me lleva a configurar un tiempo de 4 segundos, pero no consigo el efecto que busco de mezclarse el humo con las nubes, así que cierro el diafragma hasta f/22 para conseguir alargar el tiempo de exposición hasta 15 segundos.
La otra situación suele ser cuando estoy muy cerca de un objeto, como en una playa y quiero obtener nitidez de la roca y el fondo. En estos casos, f/8 o f/11 no suele ser suficiente, así que cierro más o utilizo la hiperfocal. Hay aplicaciones que te calculan estos datos y así no necesitas saberlos de memoria.
Pero, como mencionábamos anteriormente, no siempre es necesario cerrar el diafragma para conseguir que todo esté nítido. Veamos la siguiente fotografía:
Está tomada con un 35mm a f/1.4 en una cámara con sensor APS-C, por lo que la focal equivale a un 50mm. Toda la imagen sale enfocada, a pesar de haber disparado con un diafragma muy abierto. Es así debido a que estamos apuntando hacia abajo desde una distancia muy alta, por lo tanto, aparentemente todo está a la misma distancia con respecto a nosotros.
Cojamos, por ejemplo, un espacio más reducido como podrían ser este árbol y la fachada del edificio. Al estar prácticamente a la misma distancia respecto a nosotros no importa si disparamos con un diafragma f/1.4, todo se ve enfocado. Apenas hay profundidad de campo, pero está todo nítido porque todos los elementos que aparecen en la foto están un espacio reducido.
Pero la cosa cambia cuando tenemos muchos objetos separados en la distancia y queremos que todos ellos salgan enfocados. En esta ocasión sí debemos tener cuidado con el diafragma que seleccionamos y con el punto sobre el que enfocamos.
En la siguiente fotografía podemos ver a lo que nos referíamos anteriormente. Tenemos muchos frascos, unos más cercanos a la cámara y otros más alejados. Si utilizamos diafragmas muy abiertos y nos acercamos mucho a un frasco, el resto estarán fuera de foco. Por eso lo que tendremos que intentar es a la hora de enfocar es aumentar la profundidad de campo de ese modo ganaremos nitidez a partir de un punto hacia adelante y hacia atrás.
Puntos a Tener en Cuenta
Cuidado con tener el sensor sucio por alguna mota de polvo o similar. Ya que si hacemos nuestras fotos con un diafragma muy cerrado estas motitas saldrán reflejadas en nuestras fotos.
Para comprobar si está sucio puedes, antes de tomar cualquier fotografía, hacer una foto a una superficie de color homogénea y cerrar al máximo el diafragma para comprobar si hay manchas y de ese modo poder limpiar bien el sensor.
Recuerda que es importante limpiar el sensor regularmente, pero si vas cambiando el objetivo es normal que se ensucie. Si no te has dado cuenta y tus imágenes salen con pequeñas manchas, siempre puedes utilizar programas de edición como Lightroom para corregirlas.
Imagen & Info: https://www.dzoom.org.es