Cuando miramos nuestras fotografías seguro que encontramos algunas que están bien, nada del otro mundo, y luego están aquellas otras que las guardamos con un cariño especial ya que son excepcionales. Y eso sucede en todos los campos de la fotografía. Pero para este artículo hemos decidido centrarnos en un área en particular. La fotografía de paisaje. Puede que al hacer la foto hayas cometido alguno de los errores que vamos a contarte a continuación en este artículo. Lo importante es fijarte bien no en el error en sí, sino en que puedes hacer de ahora en adelante para que tus capturas sean excepcionales.
En nuestro post quincenal de esta semana no solo te mencionaremos los errores más frecuentes en fotografía de paisaje, sino que también te daremos las claves para evitarlos. ¡Vamos allá!
Las fotografía de paisaje y sus errores más comunes
La fotografía de paisaje, junto con la fotografía de retrato, es una de las temáticas más atrayentes y que a veces son el motivo principal por el que mucha gente se engancha a este arte. Pero, como cualquier temática, tiene sus propias particularidades y es muy común que repitamos una serie de errores cuando empezamos en ella.
A continuación, vamos a repasar cuáles son esos errores, para saber identificarlos y evitarlos con el fin de que nuestras capturas ganen mayor atractivo. ¿Preparad@?
Hemos dividido los errores en tres clasificaciones diferentes:
- Errores con los accesorios para tu cámara
- Errores en la forma de disparar tu cámara
- Errores en la composición
Accesorios para tu cámara
1# No llevar el trípode con nosotros
El trípode a pesar de ser el accesorio de mayor volumen es muy necesario para poder obtener buenas fotografías de paisaje. Y hay muchas imágenes que puedes perderte por no llevarlo siempre encima. Por ejemplo, imagina que te encuentras una cascada preciosa, ¿quién no querría conseguir una fotografía de ella con el precioso efecto seda del que tantas veces te hemos hablado? Pues no podrías hacer esta foto si no tuvieras un trípode. Y ya no solo eso, sino que en situaciones más corrientes, si lo empleamos siempre conseguiremos un mayor grado de nitidez.
No hace falta que lleves contigo el trípode más pesado del mercado. Por si todavía no tienes uno y estás pensando en adquirirlo, hay grandes ofertan online donde puedes acceder a uno que supla esta necesidad.
2# No usar filtros
Otro de los accesorios que pueden llegar a mejorar mucho nuestras fotografías de paisaje son los filtros. Uno de los problemas de los filtros es su coste. Algunos pueden resultan poco económicos y en parte porque se puede llegar a simular un efecto similar en el momento de la edición. Pero piensa que cuanto mejor es la imagen inicial hecha con la cámara menos trabajo de post-producción tendrás y más natural quedará el resultado. Filtros que puedan ser interesante tener:
Filtros de degradado neutros.
- Conseguir un mayor rango dinámico igualando un cielo brillante y un primer plano oscuro.
- Lograrás sacar todos los colores de un bonito cielo al atardecer a la vez que podrás sacar bien expuesta la parte de abajo de tu fotografía.
Sin filtro neutro no podrías conseguir estos resultados u optar por obtener una exposición media y después recuperar esas zonas en edición.
Filtros polarizadores.
- Lograrás eliminar el reflejo en el agua de un lago, para poder ver el fondo de este, algo que en edición difícilmente podríamos conseguir.
- Reducir la bruma atmosférica y aumentar el contraste en los cielos.
Filtros de densidad neutra
- Podrás trabajar con una velocidad de obturación más lenta a plena luz del día sin sobreexponer la imagen, con el fin de lograr tomas con el famoso efecto seda.
Son muchos los filtros que hay en el mercado. Y no hace falta que los tengas todos de una sola compra. Piensa en cuál te interesa más o cuál es el que puedes utilizar con más frecuencia y empieza por ahí. ,
3# Utilizar la Lente Equivocada
Cuando hablamos de paisaje nos viene a la mente la grandiosidad y amplitud que el paisaje presenta y que para poder recoger esa sensación con nuestra cámara tenemos que saber muy bien con que lente hacerlo.
Para una ocasión donde hay tanta amplitud, un gran angular es la lente ideal para poder plasmarlo en una fotografía, por el gran ángulo que conseguimos recoger, y por su gran profundidad de campo.
Esta es la recomendación general que te hará cualquier fotógrafo de paisaje, y funciona bien en la mayoría de situaciones. Pero existen otro tipo de lentes que nos pueden venir mejor según qué estemos fotografiando. Todo dependerá de tus preferencias. Si, por ejemplo quieres centrarte en uno de los elementos que aparecen en el paisaje que tienes delante, y que con el gran angular ese elemento aparece tan pequeño que pasa totalmente desapercibido. Quizás prefieras usar en esa ocasión un objetivo de focal más larga para centrarte mejor en él, y que así se supiera mejor cuál es el elemento protagonista de tu foto.
Con esto quiero decir que sí vas a fotografiar paisajes, incluye dentro de tus accesorios diferentes lentes de focal más larga para situaciones más concretas. Piensa que podrás convertir lo que con un angular sería una sola foto, en varias tomas interesantes que se centren en las zonas más destacadas de un paisaje.
Al disparar tu cámara
4# No disparar en formato RAW
No es la primera vez que te animamos a que dispares en formato RAW. Este formato brinda mucho más margen de corrección en el momento de la edición, por lo que podrás sacarle mucho más potencial a tu foto de paisaje.
Si aún no te hemos convencido ¿por qué no haces tú mismo la prueba? Toma algunas fotografías en formato JPEG y luego otras en RAW. Y luego compara resultados a la hora de ajustar una fotografía en JPEG y otra en RAW.
5# No mantener los horizontes rectos
Seguro que alguna vez has disparado una fotografía al mar y cuando la has revisado has comprobado que el horizonte estaba totalmente torcido. No te preocupes, nos ha pasado a todos. Este error es muy frecuente, y para evitarlo tenemos una solución muy sencilla y tienes muchas opciones:
- Puedes activar la cuadrícula en el visor para tener de referencia líneas rectas y ajustar el horizonte a ellas,
- Puedes activar el nivel en el live view si tu modelo de cámara lo tiene,
- Pues utilizar la burbuja del trípode si trabajas sobre uno, o también
- Puedes enderezar la imagen en el momento de la edición. El problema de esta última solución es que nuestra imagen perderá información en los bordes al ser reencuadrada, por lo que este será el último de nuestros recursos.
6# Usar solo el modo automático
Una buena forma de aprender y conocer nuestra cámara es trabajando en modo manual. Cierto que es más fácil y rápido trabajar con el modo automático, pero también no nos ayuda a mejorar y tampoco funciona en todas las situaciones. A veces la cámara elije valores que no son del todo idóneos para el propósito que tienes con tu foto. En ese momento, el modo manual es el único que te va a permitir hacer una fotografía de 10!
Además, cuando trabajamos en condiciones de luz extremas en las que hay mucha diferencia entre las altas luces y las sombras, puede que nuestra foto quede sobreexpuesta o subexpuesta, justo al revés de como pretendemos nosotros. Es por ello que el uso del modo manual en estos casos será nuestra mejor baza, ya que de ese modo lograremos sacar la foto que queremos y no otra.
7# Disparar solo en formato horizontal
Estamos mucho más familiarizados con el formato horizontal que con el formato vertical, y ello se debe en parte a que nuestra visión es más panorámica que vertical, o que estamos acostumbrados a ver imágenes en la televisión y el cine que también mantienen la orientación horizontal. Pero eso no tendría que reducirnos las posibilidades a aventurarnos y hacer fotografías desde todos los formatos.
En muchas de tus imágenes este formato encajará perfectamente, pero al tratarse de imágenes estáticas, nos vas a tener ningún problema tampoco si algunas de ellas las haces en vertical. La fotografía no es vídeo. En el caso del video si que es más recomendable el hacerlo en formato horizontal ya que desperdiciamos parte del encuadre, ya que no podemos girar la pantalla. Sin embargo en fotografía si quieres imprimir una fotografía en vertical, tan solo has de girarla y el espacio estará igual de aprovechado.
Con esto quiero decirte que habrá situaciones en las que un encuadre vertical encaje mejor con la imagen por la altura de nuestro sujeto, así que experimenta también con él.
Composición
8# Disparar donde todo el mundo lo hace
No ser original en fotografía de paisaje y disparar la “típica” fotografía de revista es más normal de lo que creemos. Tristemente cuando nos vamos de viaje, por ejemplo, vamos buscando los ligares más interesantes que visitar. Y normalmente es gracias a las imágenes del lugar que nos decidimos a visitarlo. Es problema está en que una vez allí tiramos la típica foto de postal cayendo en el error de tan solo fotografiar aquellos lugares más populares de la zona, hechas por muchos otros fotógrafos, olvidándonos de otras zonas
No me malinterpretéis, está bien llevarse la foto popular, has llegado hasta allí y por supuesto hay que hacerla. Pero que eso no te impida ver lo que hay alrededor, tal vez si miras un poco más allá puede haber ubicaciones con tanto o más encanto que te permitan lograr una toma más original.
9#. No Fijarse en la Luz
Cuando estas de vacaciones o haciendo una ruta es difícil poder elegir el momento del día en que visitarás un paisaje en concreto. Si tienes la suerte de poder escoger, nuestro consejo: huye de las horas centrales. Si lo que buscas es tener la mejor luz posible, entonces espérate al amanecer o al atardecer.
A veces creemos que cuanta más luz mejor, pero las horas centrales suelen caracterizarse por tener sombras muy marcadas debido a una iluminación muy dura.
La horas mágicas, tanto la hora dorada como la hora azul, serán las que te ofrezcan una luz más suave y uniforme, con colores más intensos que le darán un encanto especial a tu fotografía de paisaje.
10# No Buscar un Centro de Interés
Cuando fotografiamos un paisaje tratamos de que salga al completo, que se vea lo grande que es. Pero tener un paisaje cubierto en su plenitud no implica que no tengamos un centro de interés bien identificado. En toda fotografía debe haber un elemento que llame nuestra atención sobre el resto de elementos que aparecen en la toma.
Por muy bonito que pueda ser el paisaje, siempre debes buscar algo que pueda llamar la atención a las personas que vayan a ver tu imagen una vez editada. Un árbol solitario, una barca en medio de un lago… incluso si no encuentras nada que esté ya colocado en la escena, siempre puedes situar estratégicamente a un sujeto, para que al comparar su figura con el paisaje éste aún se engrandezca más, ya sea por el contraste de tamaño, forma o color.
11# No cuidar la composición
Aunque estés en un paisaje precioso con la luz de atardecer más bonito que te puedas imaginar, si no cuidas la composición de tu fotografía, ésta no dejará de ser una foto más. Dedícate tiempo a observar el paisaje. Contempla los elementos que hay en él y en cómo puedes colocarte para sacar el mejor encuadre posible. Mira el fondo, y decide cuál quieres que sea tu centro de interés y en cómo puedes resaltarlo.
12# No aprovechar la fuerza del primer término
Una imagen es bidimensional, pero existen trucos para engañar a nuestro ojo y simular cierta tridimensionalidad en ella.
Imagina que estás delante de un paisaje. Llegas y disparas la foto, a la altura de tus ojos, sin analizar la escena. Solo disparas. Ahora, lo haces bien. Primero imagina que estás en esa misma escena, pero observas todo lo que te rodea. Mirando puede que te percates de un arbusto que tienes a tu lado, o del tronco que sale en la orilla de un lago. Te acercas a él, y lo colocas en primer término de la imagen. Tal como se ha hecho aquí.
Con esta sencilla acción lo que estamos haciendo es buscar el volumen en una imagen, es buscar la tridimensionalidad en una fotografía. Así que ten esto presente, y cuando tengas un elemento en primer término que merezca la pena, inclúyelo en tu captura.
13# Espacio negativo sin interés
Cuando fotografiamos un paisaje y aparece gran parte del cielo de un azul claro, despejado y sin ninguna nube, esa zona del cielo suele considerarse como espacio negativo. La definición de espacio negativo es “aquel espacio que rodea al elemento protagonista pero que no aporta información relevante a la toma”.
Si dejamos que ese cielo ocupe mucha parte de la fotografía estamos contribuyendo a que la toma sea poco interesante. Una forma de evitarlo es reducir la porción de encuadre que ocupa el cielo en la toma, elevando la línea del horizonte al tercio superior de la imagen. También puedes acudir en otro momento a la localización y esperar a que aparezca alguna nube para que esta haga más dramática la toma.
14# No contar una historia
Una fotografía de paisaje no tiene por qué ser una fotografía vacía o carente de mensaje. Debes buscar una historia para contarla con tu fotografía. Por muy bonito que pueda ser un paisaje, si tratas de buscar un mensaje, la forma de contar una historia a través de ella, la toma será infinitamente más atractiva. Para ello, puedes jugar con varios ingredientes, como una buena iluminación, una buena composición o un centro de interés bien identificado entre otras cosas.
¡Mejora tus fotografías de paisaje!
Ya has visto 14 errores que solemos cometer a la hora de practicar la temática de fotografía de paisaje, pero ojo, mantén tu mente abierta porque lo que a veces puede ser un error importante, en otra ocasión puede marcar la diferencia entre una toma corriente y otra excepcional.
Recuerda que no es malo cometer errores, porque de ellos se aprende. Y seguramente a parte de estos 14 habrán muchísimos otros que aun y teniéndolos identificados, los volvamos a repetir.
Pero por lo menos, ahora sabremos identificarlos y aprenderemos la lección, por lo que nuestras fotografías ganarán mayor atractivo.
¿Y tú? ¿Añadirías algún error más a la lista? ¡Cuéntanoslo en los comentarios!
Info & Imag: dzoom.org